LA CANTANTE DE "SIN DUDA"



Pues la verdad No Doubt me gustaba alguito, pero pues ya esta mujer sola, aunque regüena, como que si no aguanta pagarle boleta, por muy veinte mil pesos que haya estado... Sin embargo, mi ya entrada en años curiosidad me llevó hasta Yutub, donde me encontré con una delicia de video. Dejo el enlace al final si alguien lo quiere ver, pero les ahorraré unos minutos de sus vidas describiéndolos.

El video lo realizó una nerviosa mujer con una cámara cuya calidad hace pensar que se filmó con un beeper. El video empieza luego de unos breves segundos en unas semi totales penumbras, y como un dios vengativo se ilumina el escenario para dejarnos ver a la cantante en cuestión, aunque la lejanía permitiría que la del escenario fuera cualquier mujer, hasta por momentos podría ser blacky o el chavo del ocho del centro saltando. El audio hasta aguantaría, si no fuera porque la portadora de la beeper-cámara empieza a gritar, no bien ve a la Stefani: ¡no me muevan, no me muevan, no me muevan, no me muevan!
- ¿Está grabando? no tarda en preguntar su acompañante, y se calla tras recibir respuesta afirmativa, la camarógrafa nos deleita con su versión de What You Waiting For?, descachándose en los
Oh, ah, oh, para disponerse a cantar voz en cuello y bien pegada al micrófono: -uachugüeri, uachugüeri, uachugüeri, uachugüeri, uachugüeri foooooooooo (bis)

Es que ni el "tick tock" le sonaba bien, santamadrededios, que alegría que no tenía ni ganas de ir, capaz que queda uno al lado de esta üen estéfani. Luego siguen cuatro minutos de rubias, y el juego es ver cual es Gwen, cual es corista, o cual es natural. esto, claro está, condimentando con los infaltables griticos "uuuuuuh", que han hecho las delicias de los conciertos desde las cocacolas bailables y los bazares de la cuadra.
Pero paciencia, que viene lo mejor, luego del minuto cinco, que es cuando la camarógrafa enloquece y empieza a presentar a su banda a ver , aver, veeen, no, hágase acá, hágase acá, uy, uy, pero no se acerque tanto, toma innecesaria a la trangamanada de personas que fueron, toma a los amiguetes, toma al que preguntó si estaba gabando, llamado a gritos a algún Andrés que ignoraba la cámara y que parece decir que botó el celular, unos amiguis super chéveres guón hablan a cámara y toma final al escenario donde cinco rayos de luz que asume uno son Stefani y sus bailarinas huyen despavoridas.

Para ser sinceros, hasta lástima me da no haber gastado los veinte mil pesos, carajo.