BlacKkKlansman: Demasiada corrección política

Es muy llamativo como en los setentas se hacía un cine transgresor y emocionante, y como se ha ido edulcorando con el paso de las décadas, hasta encontrarnos con productos como BlacKkKlansman, una cinta más preocupada por quedar bien con el público que por darnos un solo momento emocionante.




La cinta hace homenaje al Blaxploitation, movimiento fílmico que exaltaba las virtudes de la comunidad afroamericana de principios de los 70s. Pero ese homenaje palidece ante un resultado muy poco comprometido. BlacKkKlansman nos cuenta la historial real de Ron Stallworth, el primer policía negro del departamento de policía de Colorado Springs, y quien se infiltró en el Ku Klux Klan. Desafortunadamente la promesa del personaje infiltrado no resulta tan efectiva como pareciera,por cuanto la cinta es muy predecible y sin mucho suspenso.

Spike Lee,director de la película y que siempre se ha mostrado como un director políticamente comprometido, sacrifica el posible entretenimiento por darle al producto un caracter de controversia actual que no necesita, creando un paralelo entre el Ku KluX Klan y la administración Trump (Por poner un ejemplo, David Duke, ex líder "Gran Mago"  del KKK y quien apoyó la candidatura de Trump, menciona en su diálogo la intención de hacer a América grande de nuevo, conocido slogan del actual presidente norteamericano). 


las actuaciones no son particularmente logradas,los personajes son planos y no alcanzan a emocionar al público. Los buenos son unidimensionales, y los malos no son convincentes. Una lástima que una idea tan sugerente y con tanto juego haya quedado limitada a una película demasiado correcta políticamente hablando.